Página 30 - La democracia cristiana y el gobierno de Allende

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hace una relevante alusión a esta situación. Corvalán escribe “no podría decir que el
Gobierno de Allende estuvo exento de errores. Nos envolvió el sectarismo. Fue uno
de los factores que impidieron consolidar y ampliar los vínculos y las acciones
comunes con la Democracia Cristiana en los primeros tiempos. Tras el propósito de
cumplir con los objetivos que a la mayoría le interesaban, debimos plantearnos, en
tanto se conocieron los resultados de la elección presidencial, el entendimiento a
largo plazo con el partido de Radomiro Tomic, sumar y no restar fuerzas” 35. Más
adelante, Corvalán dice: “la embriaguez de la victoria y el sectarismo que acorta la
vista, nos impidieron ver con profundidad y en la perspectiva del tiempo, la
magnitud y seriedad de las responsabilidades que asumíamos y la necesidad de
buscar un gran acuerdo con la DC. En su interesante aporte, Corvalán recuerda los
grandes acuerdos que se habían producido y la posición de la DC en iniciativas de
gran trascendencia como la nacionalización del Cobre y la Reforma Agraria.
Muchas veces me he preguntado, ¿cuántas misas de duelo nos habríamos evitado
en el largo período dictatorial, si la UP hubiese aceptado ir a misa con Tomic en
1970?
Por supuesto que esos eventuales acuerdos traerían desafíos muy grandes. Las
diferencias ideológicas y los objetivos últimos eran tan distintos. Jorge Arrate los
plantea de este modo: “La línea comunista postulaba la vía pacifica como forma de
acceso al poder. Pero la fundaba en una primera etapa, en la política de liberación
nacional que preconizaba la unión del proletariado con los segmentos progresistas
de la burguesía nacional, a los que se reconocía atributos como para encabezar la
alianza con el objetivo de concluir las tareas democrático burguesas y, luego, en
una etapa posterior, encaminarse hacia la dictadura del proletariado.”36 Esto es lo
que Luis Corvalán, en su hablar tan singular, describía como un tren que viajaba
hasta Puerto Montt y en el que los pasajeros se bajaban, decía él, o los bajaban,
agrego yo, en las estaciones anteriores.
La DC y las Alianzas
Para refrescar la memoria de algunos y para informar a otros, quiero recordar que
mantener al PDC en la posición que creía, y sigo creyendo que era la correcta, no
fue una tarea liviana. Por una parte la DC tenía serias carencias para trabajar con
otras fuerzas. Un destacado militante socialista señaló que la DC “ha tenido siempre
dificultades para constituir una definición sobre alianzas estables.”37 Creo que esa
afirmación hecha en 1989, no es válida para la época en que la Falange colaboró
con el gobierno de Arturo Alessandri, donde Leihgton fue Ministro del Trabajo, con
los Gobiernos radicales, Frei fue Ministro de Obras Publicas de Juan Antonio Ríos,
trabajó por Pedro Enrique Alfonso.38 En 1958, Frei estuvo a punto de ser apoyado
por los Liberales, lo que afortunadamente no ocurrió, ya que ese acuerdo habría
35 Corvalán, Luis: op citada, página 10.
36 Arrate, Jorge e Hidalgo, Pablo: “Pasión y Razón del Socialismo Chileno”, Ediciones del
Ornitorrinco, Santiago, 1989 página 80.
37 Ibíd. , página 65.
38 Candidato del PR a la Presidencia de Chile en 1952, que fue derrotado por el ex General
Carlos Ibáñez.