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Nº 2 octubre 2014 / El Paracaídas
LA CHILE Y
LA DESIGUALDAD
DE GÉNERO
E
n Chile, el 87 por ciento de las mujeres cree que el país es machista y el 71 por ciento
piensa que son discriminadas. Desde el 2005 hasta el 2013, el área con el sentimiento de
discriminación más alto es el trabajo, con cifras alrededor del 90 por ciento.
La realidad del país no dista mucho de lo que sucede al interior de la Universidad de Chile: dos
estudios realizados recientemente al interior de la institución revelan la dispar situación en que
se encuentran directivas, académicas, funcionarias y estudiantes respecto de sus compañeros.
En sus 172 años de existencia, la universidad pública más importante del país nunca ha tenido
una rectora. Actualmente, menos de la mitad de los decanos son mujeres, un tercio de los inte-
grantes del Senado Universitario son femeninos y la misma proporción corre para el porcentaje
de académicos versus académicas: por cada dos docentes masculinos hay una femenina.
La situación se agrava en facultades como Ciencias Físicas y Matemáticas –hay ocho acadé-
micos por una académica-, Economía a Negocios –cinco a una-, Instituto de Asuntos Públicos
–cuatro a una- y Derecho –cuatro a una-. El INTA es el único organismo universitario que
tiene un porcentaje superior de académicas, con el 55,4 por ciento.
En promedio, las mujeres que trabajan en la Universidad de Chile obtienen el 80 por ciento
del sueldo de los hombres, cifra que reproduce las brechas salariales existentes en el país. Las
vicerrectoras, por ejemplo, ganan un tercio menos que sus pares masculinos.
Si bien en la Universidad existen centros dedicados al estudio de esta materia, como el Centro
Interdisciplinario de Estudios de Género de la Facultad de Ciencias Sociales y el Centro de
Estudios de Género y Cultura en América Latina de la Facultad de Ciencias Sociales, aún
quedan temas pendientes por avanzar en igualdad de género dentro y fuera de la institución.
Ante este diagnóstico, Revista El Paracaídas recogió cifras, análisis y testimonios, con el fin
de dar cuenta de una realidad institucional que impacta y que es espejo de la situación de las
mujeres en Chile.
