Allende, lugar en el que el médico nunca dejó de trabajar
luego de asumir como director del Psiquiátrico.
En su informe número 265/2011 del 16 de marzo de 2012, la
Contraloría calificó esta doble función como “absolutamente in-
compatible”. Empleos calificados como Alta Dirección Pública,
dice el documento, dada su jerarquía, “justifican que quienes los
desempeñen se dediquen únicamente al desarrollo de las tareas
propias de esas plazas, afectándoles la prohibición de desempeñar
cualquier otra función o cargo remunerado,sea público o privado”.
Un informe de seguimiento de Contraloría del 29 de abril de
2013, indicó que posteriormente la situación fue subsanada
por el Dr. Claudio Caro, mediante la resolución exenta N°191
del 7 de febrero de 2012 –ocho meses después de que asumiera
Cancec como director en el Psiquiátrico– en la que autorizó al
médico a cumplir con 11 horas de trabajo en el CRS, ajustán-
dose así a la Ley 20.261 que rige a los Altos Cargos Públicos.
EL PASADO
“Estudiamos juntos en la Facultad de Medicina de la Uni-
versidad de Chile durante la Unidad Popular y después en
dictadura. Siempre fue raro, oscuro, desconfiado. Sospechá-
bamos de él desde antes del Golpe. Era abiertamente anti-
comunista, pero no sabíamos qué vínculos tenía. Una vez en
dictadura se volvió alguien totalmente no confiable. Pensá-
bamos que participaba en la delación de la gente de la Facul-
tad”, recuerda una ex compañera de la época.
Según los registros de la Universidad de Chile, Cancec Itu-
rra se graduó como Médico Cirujano en 1979, obtuvo un
Magister en Salud Pública con Mención en Epidemiología
en 1987 y Magister en Administración de la Salud en 1993.
Para varios de sus colegas consultados para este reportaje
es un misterio si Cancec cursó o no la Beca de Psiquiatría.
Sin embargo, recuerdan sus esporádicas apariciones en al-
gunas actividades de los becados en el Hospital Psiquiátrico
durante la década de los ochenta: entonces, el ya médico
cirujano, llamaba la atención por haber convertido su ca-
racterístico pelo liso y oscuro en una cabellera crespa, al
tiempo en que su actitud silenciosa y esquiva era aún más
acentuada que en el pregrado. El grupo de becados, confor-
mado mayoritariamente por gente de izquierda, resentía su
participación y evitaban su presencia en reuniones clínicas
y otras actividades.
“Una vez le preguntamos al Dr. Mario Gomberoff –el Jefe
de Servicio en el Psiquiátrico en ese tiempo– qué hacía
Cancec ahí. Él nos dijo que estaba haciendo una beca en la
Escuela de Salud Pública con especialidad en Psiquiatría”,
explica uno de esos becados, hecho que se contradice con
los antecedentes académicos que hoy se tienen.
Los pasos del médico durante los años ochenta son con-
fusos. Trabajó y estudió en la Escuela de Salud Pública de
la U. de Chile, en esos años liderada por el Dr. Ernesto
Medina Lois, hermano de quien fuera Rector designado de
la Casa de Bello en dictadura, el general de la Fuerza Aérea
Alejandro Medina Lois. Sus colegas de entonces insisten
en la vinculación de Cancec con el gobierno militar y se-
ñalan que en ese tiempo se paseaba armado por la Escuela.
Los rumores de la época también lo sindican como el psi-
quiatra de Lucía Hiriart de Pinochet. “Era una persona a
Sus colegas de entonces insisten en la vinculación de Cancec con el gobierno
militar y señalan que en ese tiempo se paseaba armado por la Escuela.
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El Paracaídas / Nº 5 enero 2015