Arte en la Chile
Revista de la Facultad de Artes
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“El área de música cuenta con las especialidades de guita-
rra, piano, saxofón, percusión, viola, violín y flauta traversa,
además de un ramo teórico. Mientras que en danza se to-
man cursos de Introducción a la Técnica Académica y otro
de Introducción a la Técnica Moderna y Contemporánea,
y en un tercer año un curso de Improvisación y Creación”,
cuenta Evelyn Yavar, ex estudiante del Isuch, Intérprete en
Danza, profesora y coordinadora de la Escuela Exploratoria
Artística del Isuch. Artes visuales, por otra parte, enfoca sus
estudios en dibujo, volumen, escultura, imagen y soporte.
Además de esta formación integral, el Isuch ostenta buen ren-
dimiento en la Prueba de Selección Universitaria (PSU) y un
casi nulo índice de maltrato o acoso entre compañeros, hoy
conocido como
bullying
, acentuando la buena convivencia en-
tre profesores y estudiantes.
Educación especializada y
comprometida
Mónica Retamal, académica del Departamento de Música y
Sonología (DMUS) de la Facultad de Artes y también directo-
ra estudiantil de la Facultad de Artes, recuerda sus años se-
cundarios con mucha emoción, ya que además de estudiar y
especializarse en el área musical conoció el compañerismo y
la disciplina. “Como todos estudiaban música o danza en esa
época, nos relacionábamos de una forma muy especial. Hay
una aceptación del otro tal cual es. Había mucha gente distinta,
no había chicos normales en el buen sentido de la palabra. Po-
dían ser brillantes, tímidos o de personalidades dispersas. Yo
sentía que todos éramos aceptados inmersos cada uno en su
disciplina”, rememora.
El Isuch incluso ha sido la cuna de muchos artistas nacionales
que han pasado a la historia por su destacada labor artística
y aporte al país como los son Roberto Bravo, Elvira Savi, Ci-
rilo Vila, Matilde Pérez y José Balmes, entre otros importantes
creadores.
REPORTAJE
“Este colegio ha significado un gran cambio en mi vida. Tener
clases artísticas en la tarde, conocer gente con mis mismos
intereses, ver la danza como algo más serio, son cosas que me
gustan. A veces es cansador. Pero en ese momento me pre-
gunto: ¿Por qué estoy haciendo esto? ¿Qué es lo que me hace
estar aquí? Después no me es difícil sacar esos pensamientos
de desánimo de la cabeza ya que estoy haciendo lo que amo”,
cuenta Esperanza, estudiante de la línea de danza en el Isuch.
Reforma educacional y desafíos
Este 2015 el Isuch cumple 82 años y su administración conti-
núa resistiendo a los distintos cambios educacionales y esta-
tales. En 1993 se aprobó la ley 19.271, la cual no permitió que
los organismos del Estado subsidiaran a colegios. Es decir, el
Isuch ya no podía estar bajo el cargo de la Facultad de Artes
de la Universidad de Chile. “Desde ese momento nos conver-
timos en un establecimiento particular pagado pero continua-
mos con el lazo y misión de la Facultad de Artes. Por ejem-
plo, todos los profesores de la Escuela Exploratoria Artística
son egresados de la U. de Chile, conocen su pensamiento y
se lo transmiten a los estudiantes”, dice el profesor Morán.
Debido a esta nueva figura legal, hoy el Isuch no forma parte del
Plan Nacional de Arte en la Educación del Ministerio de Educa-
ción que contempla equipamiento nuevo para el área artística
de establecimientos municipales y subvencionados. “Nosotros
luchamos para que exista la creación de una división de Educa-
ción Artística, así como existe un Técnico Profesional”, afirma el
director y agrega que la Ley General de Educación “ya reconoce
la existencia de la educación artística y sus líneas de formación,
pero si no tenemos un aporte especial para estas escuelas es-
pecializadas es imposible llegar a la mención que aspiramos”.
En este aniversario octogésimo segundo, los esfuerzos del
Isuch se centran en consolidar su modelo de Escuela Explo-
ratoria Artística para que sus estudiantes obtengan sólidos co-
nocimientos “que se articulen con las Etapas Básicas de la Fa-
cultad, orientando los procesos de formación a nivel escolar”,
afirma el director del colegio Jorge Morán. Además, se está
gestionando la posibilidad de trasladar al Isuch a otro inmueble
“que nos permita tener espacios suficientes para dar cabida a
mayor número de estudiantes por curso de enseñanza básica
y media. Esto nos dará la oportunidad de activar programas
de rebajas de arancel a estudiantes talentosos que no pueden
costear sus estudios”, concluye el profesor Morán.