Enfrentando los cambios globales: anuario de políticas exteriores latinoamericanas: 1991-1992

EL PROCESO DE INTEGRACION REGIONAL EN AMERICA LATINA Lincoln Bizzozero 1 La nueva vitalidad del proceso de integración El proceso de integración latinoamericano durante 1991 cobró un nuevo ímpetu. En el Cono Sur, luego de la definición de un mercado común como objetivo en el Tratado de Integración, Cooperación y Desarrollo, finnado en noviembre de 1988 entre Argentina y Brasil, se aceptó la incorporación de Paraguay y Uruguay en agosto de 1990. Esta se formalizó en el Tratado de Asunción, en marzo de 1991. En el caso del Pacto Andino, la IV reunión del Consejo Presidencial, realizada el 30 de noviembre de 1990 en La Paz, planteó un cronograma de acciones cuyo objetivo es el mercado común para 1995. El denominado Grupo de los Tres, constituido por Colombia, México y Vene– zuela, reafinnó en la Cumbre Iberoamericana las resoluciones de marzo de 1990, cuando decidieron avanzar en la integración económica, selectiva, sectorial y gradual entre los países y coordinar la cooperación hacia los estados de América Central yel Caribe. Por otra parte, varios países estable– cieron compromisos de complementación económica: Chile-Argentina (agosto del 90 y agosto del 91), Chile-México (octubre del 90 y septiembre del 91), Chile-Venezuela (octubre del 90 y abril del 91), México y los países de América Central (enero del 91) y Argentina-Venezuela (septiembre del 90). Más allá de las problemáticas planteadas con la renaciente vitalidad de los procesos de integración, que pasan por definiciones geográficas (espacio ocupado por cada uno de los procesos), programáticas (ritmos de la liberali– zación e instrumentos reguladores de la misma), normativas (marco compe– titivo para las empresas y productores) e institucionales (estructura y funcio– nes de los órganos), existen algunos presupuestos comunes que los orientan. 1 Departamento de Postgrados. Facul tad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República. Montevideo, Uruguay.