Materia y memoria: tesoros patrimoniales de la Universidad de Chile

las representaciones antropomorfas y probablemente losmotivos de estrella fueron asociados en el grupo cul- tural al género femenino. Pese a que no se conoce en realidad un sitio con exactamente las mismas carac- terísticas culturales como para ser incluidos en alguna fase o complejo cultural regional, este sitio comparte muchos elementos con el Complejo Llolleo. El collar de cuentas hecho de tembetá fue hallado en un ajuar y se encuentra asociado a niños y a mujeres adultas. Las cuentas de minerales de cobre delatan el viejo sentido del adorno corporal que especifica rangos, géneros, ge- neraciones (3) . Encontradas en los ajuares mortuorios, reverberan un tiempo en el que las diferencias entre hombres y mujeres fueron tenues, en que al parecer la complementariedad más que la oposición fundó las identidades femeninas y masculinas. El poderoso significado de la bebida emerge en este jarro de doble cuerpo, que quizás contuvo chicha, y que recuerda su cotidiano compartir o el ceremonial colectivo en el que bebían las parentelas (4) . Como materialidad y como producto “cocido” por las mujeres, denota el manejo de las claves culturales que ellas reproducían, conocían y dominaban. En la cultura Llolleo es típico encontrar entierros en donde se acompaña a los muertos con cerámicas, den- tro de las cuales no se han encontrado rastros de comi- da. Estilísticamente este objeto es muy representativo de este complejo cultural: es asimétrico, y destacan en él el asa y el gollete. Tres fueron las vasijas de este tipo encontradas en el sitio, la de la imagen corresponde al periodo alfarero temprano de Chile Central, en en- tierros que se asocian a mujeres adultas (5) . El trazado continuo de cejas y nariz, formando dos arcos donde reposan los ojos, proyecta el estilo de los habitantes de Chile Central. Sus rituales funerarios prescribieron en esta miniatura un gesto de mímesis y ofrenda, evo- cando las vasijas que en vida unieron, ya sea comien- do o bebiendo, a los sujetos en una comensalidad que los hacía hermanos y hermanas entre sí. Junto a estas vasijas, la “cerámica matada” -piezas confeccionadas y destruidas con fines funerarios- pone en evidencia que nuestros parientes del temprano Chile Central elabora- ron representaciones en las que la chicha, como bebida compartida, fue un símbolo de la sociabilidad. También destaca otra vasija por sus detalles antropomorfos inci- sos, el uso de un solo color -monocromía- sin decoracio- nes, aunque su estética escapa a la típicamente identi- ficada como propia del Complejo Llolleo (6) . El Sitio Los Jazmines (Melipilla) fue excavado por un equi- po de la Universidad de Chile compuesto por Carlos Thomas y Carlos Ocampo, entre los años 1985-1986. Los restos encontrados en este sitio corresponden a un cementerio perteneciente al periodo cerámico tardío -Aconcagua e Inca-, con contacto con componentes hispanos (1470 al 1536 d.C.), en el que se hallaron ente- 3. N° Inventario: s/n° Sitio: El Mercurio Área: Chile central Cronología: 400-1000 d.C. Adscripción cultural: Complejo Llolleo Descripción: collar 4. N° Inventario: A00004 Sitio: El Mercurio Área: Chile central Cronología: 150 d.C. Adscripción cultural: Descripción: vasija cerámica 150

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